Suplementos de NAD: ¿longevidad o exageración?
Feb 12, 2025En los últimos años, la búsqueda de longevidad y salud óptima ha ocupado un lugar central en el mundo del bienestar (wellness). Sin embargo, esto ha generado una obsesión desmedida por “posibles” formas de extender nuestra vida natural.
No solo desmedida, sino también inapropiada. Cuanto más escuchamos sobre nuevos suplementos milagrosos, más ignoramos intervenciones respaldadas por evidencia científica que realmente prolongan la vida funcional: mantener un peso saludable, seguir una dieta rica en frutas y verduras, hacer ejercicio de fuerza, no fumar y, en cuanto al alcohol, consumirlo con extrema moderación (o mejor aún, evitarlo por completo). Pero, claro, esto no vende titulares ni genera buzz. Así que aquí estamos.
Y no me las doy de santo. A mí también me atraen estas ideas. ¿Por qué no vivir más y ser testigo de los desastres naturales que se avecinan, las guerras provocadas por ególatras y la inevitable toma de poder de los robots con inteligencia artificial? Un futuro bellísimo.
Moving on.
Entre los suplementos más comentados en el mundo de la longevidad está el NAD (nicotinamida adenina dinucleótido), una molécula clave en la producción de energía celular y, en teoría, en la salud general. Su popularidad es tal que en Nueva York hay servicios médicos que van a tu casa para administrarte un suero con NAD, mientras que websites repletos de fotos de celebridades juran que es el elixir de la juventud. It’s a thing.
Pero, ¿qué es realmente el NAD y por qué está causando tanto revuelo? En esta publicación, exploraremos la ciencia detrás de esta molécula, sus supuestos beneficios para la longevidad, la salud cognitiva y la función metabólica. Analizaremos con calma los datos actuales y, como es costumbre, daré mi veredicto al final.
¿Qué es el NAD?
El NAD es una coenzima presente en todas las células de tu cuerpo. Una coenzima es como un copiloto en un auto de carreras: ayuda a las enzimas (piloto) a hacer su trabajo más rápido y eficiente al proveer instrucciones puntuales y certeras. Su trabajo es clave: ayuda a convertir los nutrientes en energía, reparar el ADN y regular procesos celulares esenciales.
Pero hay un problema—con el paso de los años, los niveles de NAD caen en picada, y muchos creen que esta disminución contribuye al envejecimiento y a las enfermedades asociadas con la edad.
Aquí es donde entran los suplementos. La teoría es que al tomar precursores de NAD, como la nicotinamida ribósido (NR) o la nicotinamida mononucleótido (NMN), podríamos frenar esta caída y, en consecuencia, respaldar la salud general. Al menos, esa es la promesa. Si esto realmente se confirmará en humanos a gran escala, todavía está por verse.
El (supuesto) Papel del NAD en la Longevidad
El NAD es una pieza clave en la producción de ATP, la moneda energética de nuestras células. También activa a las sirtuínas, un grupo de proteínas a las que les encanta que las llamen los "genes de la longevidad". Estas sirtuínas se encargan de reparar el ADN, reducir la inflamación y proteger a las células del estrés. Suena increíble, ¿verdad? Y lo es... en ratones. Porque sí, los estudios han demostrado que aumentar los niveles de NAD en modelos animales puede extender la vida útil y mejorar el healthspan (el tiempo que vivimos en buen estado de salud). La palabra clave aquí es “animales”. Cof, cof.
¿Qué sabemos hasta ahora en humanos?
Podríamos pasar horas hablando de modelos celulares y estudios en ratones, pero seamos honestos: who cares? Lo que realmente importa es qué efecto tiene este suplemento en humanos. Porque al final del día, lo que quieres saber es si vale la pena invertir en él… o si mejor reservas una cena en un restaurante fancy. O un viaje. (Uy, París 😍).
NAD y longevidad
Se han realizado varios estudios sobre la nicotinamida mononucleótido (NMN), un precursor del NAD, y su impacto en la salud humana. Uno de los más destacados fue un ensayo aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo (o sea, de los bien hechos). Este estudio mostró que la suplementación con NMN no solo aumentó significativamente los niveles de NAD en sangre, sino que también mejoró el rendimiento físico en adultos sanos de mediana edad, medido con una prueba de caminata de seis minutos. Además, el NMN fue bien tolerado, sin efectos adversos significativos, lo que refuerza su perfil de seguridad.
Otro estudio en adultos mayores encontró que la suplementación con NMN aumentó los niveles de NAD en sangre, ayudó a mantener la velocidad al caminar y hasta mejoró la calidad del sueño durante un período de 12 semanas. Nada mal. Si estos resultados se sostienen en estudios más grandes y a largo plazo, el NMN podría ser una herramienta útil para mantener la función física y mejorar el descanso, dos aspectos clave para un aging saludable.
Pero antes de perder la cabeza: ¿son estos resultados transformadores y clínicamente significativos? La respuesta es… meh. Nadie sabe. Son hallazgos interesantes, sí, pero los mismos beneficios pueden lograrse con estrategias gratuitas y con mucha más evidencia detrás, como una dieta mediterránea, ejercicio de fuerza o un buen programa de higiene del sueño con terapia cognitivo-conductual.
Moving on.
NAD y la Salud Cognitiva
Ahora pasemos a otro gran tema asociado con este suplemento: la salud cerebral.
El deterioro cognitivo es una preocupación creciente con el envejecimiento, y en la mente de muchos investigadores, el NAD podría ser parte de la solución. La teoría dice que el NAD apoya la función cerebral al mejorar la función mitocondrial y reducir el estrés oxidativo, dos factores clave para preservar la memoria y el rendimiento cognitivo. Todo suena prometedor… pero ya sabes, en su mayoría, esto se ha visto en animales.
Veamos algunos hallazgos en humanos.
Un estudio piloto aleatorizado, triple ciego y controlado con placebo evaluó una combinación de nicotinamida y D-ribosa (conocida como RiaGev) en adultos sanos de mediana edad. Los resultados mostraron un aumento significativo en los niveles del metaboloma del NAD en el cuerpo. Además, los participantes reportaron mejoras en concentración y motivación, medidas a través del cuestionario Checklist Individual Strength (CIS). Hasta aquí, todo bien.
Otro estudio interesante, un ensayo fase 2A de prueba de concepto, analizó el impacto de la nicotinamida en pacientes con Alzheimer en etapas iniciales. Aunque no se encontraron cambios relevantes en los biomarcadores principales de la enfermedad, los investigadores observaron una progresión más lenta en la puntuación del Clinical Dementia Rating Summary of Boxes (CDR-SB).
Pero no todo es color de rosa. Un ensayo aleatorizado controlado con placebo evaluó los efectos de la nicotinamida ribósido (NR) en adultos mayores con deterioro cognitivo leve (DCL). Aunque la suplementación aumentó los niveles de NAD+ en sangre, no se observaron mejoras significativas en las pruebas cognitivas, como el Montreal Cognitive Assessment (MoCA).
Hasta ahora, los estudios muestran pequeños indicios de utilidad, pero la evidencia sigue siendo limitada, incierta y con un valor clínico altamente cuestionable.
Y si estamos hablando de longevidad, no podemos evitar la temida palabra C…
NAD y el Cáncer: Un Arma de Doble Filo
El entusiasmo por el NAD en la prevención del cáncer tiene una base lógica: su papel en la reparación del ADN y la producción de energía celular lo convierte en un candidato potencial para reducir el riesgo de ciertos tipos de cáncer. Ojo con la palabra clave: potencial.
Algunos estudios preclínicos (es decir, antes de probarse en humanos) han mostrado que la nicotinamida puede inhibir el crecimiento de melanoma en modelos celulares (in vitro). Suena prometedor, pero hasta ahora, la evidencia clínica sólida en humanos sigue siendo escasa.
Un avance interesante
Un estudio de Fase 3 aleatorizado, publicado en The New England Journal of Medicine, encontró que la administración oral de nicotinamida redujo significativamente la incidencia de nuevos cánceres de piel no melanoma y de queratosis actínicas en personas de alto riesgo. Esto es evidencia real en humanos y definitivamente vale la pena seguirle la pista. Si estás considerando el uso de nicotinamida para la prevención del cáncer de piel, lo más sensato es consultar con un dermatólogo o profesional de la salud para obtener orientación personalizada y basada en evidencia.
Precauciones y consideraciones
La relación entre el NAD y el cáncer es como la de Trump y Musk: complicada. Algunos estudios en modelos celulares sugieren que ciertas células cancerosas podrían aprovechar las vías del NAD para alimentar su crecimiento. Y aquí es donde entramos en terreno incierto.
Además, algo que siempre me inquieta: los efectos secundarios. Si vamos a hablar de suplementos, hay que hablar también de lo que pueden provocar. Se han documentado casos de náuseas, vómito, daño hepático y reacciones en la piel. Así que no, nada es completamente inofensivo.
¿Podemos aumentar los niveles de NAD de manera natural?
Cómo Aumentar el NAD de Forma Natural
Afortunadamente, hay formas naturales (y bastante sencillas) de aumentar los niveles de nicotinamida adenina dinucleótido (NAD) a través del estilo de vida, la nutrición y el ejercicio.
Por ejemplo, la actividad física regular ha demostrado elevar los niveles de NAD. Tanto el ejercicio agudo como el crónico estimulan su metabolismo. En estudios humanos, el entrenamiento en intervalos de alta intensidad (HIIT) y el entrenamiento continuo de intensidad moderada (MICT) han aumentado los niveles de NAD+ y la expresión de las enzimas que lo regulan en células del sistema inmunológico. Básicamente, moverte más = más NAD.
Alimentación y NAD
También hay alimentos que pueden ayudar. Algunos contienen precursores naturales del NAD, como la nicotinamida ribósido (NR) y la nicotinamida mononucleótido (NMN) . ¿Dónde los encuentras? En alimentos como la leche, el pescado y las verduras de hoja verde. No necesitas cápsulas sofisticadas: la comida real también cuenta.
El beneficio real de estas estrategias
Lo que más me gusta de estos enfoques es que no solo pueden apoyar los niveles de NAD, sino que además tienen evidencia sólida para optimizar el peso corporal, prevenir la resistencia a la insulina y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Y lo mejor: no implican un gasto extra ni otra cosa más de la que preocuparse.
Simple, efectivo y con beneficios comprobados.
Conclusión: ¿Vale la pena el bombardeo mediático del NAD?
Después de revisar la evidencia, la historia del NAD se resume en tres palabras: interesante, prometedor… incierto.
Sí, es una molécula fundamental para el metabolismo y la reparación celular. Sí, sus niveles disminuyen con la edad. Y sí, existen estudios preliminares que sugieren posibles beneficios en longevidad, función cognitiva y salud metabólica. Pero la gran pregunta sigue en el aire: ¿suplementarlo realmente marca una diferencia significativa en humanos?
Por ahora, la respuesta más honesta es: nadie sabe. Los estudios en animales pintan un panorama esperanzador, pero cuando pasamos al terreno humano, los resultados son modestos en el mejor de los casos y nulos en el peor. ¿Aumenta los niveles de NAD en sangre? Sí. ¿Eso se traduce en beneficios clínicamente relevantes? Aún no está claro.
¿Significa esto que los suplementos de NAD son un desperdicio total? No necesariamente. Si tienes dinero de sobra y te emociona la idea, adelante, siempre y cuando aceptes la incertidumbre. Como médico, no me veo recomendándolos ni haciendo que mis pacientes gasten dinero en ellos por ahora. Pero mantendré la mente abierta.
Y recuerda, si buscas optimizar tu salud de manera efectiva y con evidencia más sólida, el mejor plan sigue siendo el de siempre (el de nuestras abuelas): ejercicio de fuerza, una alimentación rica en frutas y verduras, buen descanso y un consumo controlado (o inexistente) de alcohol.
Nada nuevo. Nada sexy. Pero funcional.
Así que la próxima vez que veas una clínica en NYC vendiendo sueros de NAD con fotos de celebridades, piénsalo bien: puedes gastar cientos de dólares en una infusión… o simplemente hacer ejercicio, comer bien y dormir mejor.
Tú decides.
Fuentes:
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Morifuji M, Higashi S, Ebihara S, Nagata M. Ingestion of β-nicotinamide mononucleotide increased blood NAD levels, maintained walking speed, and improved sleep quality in older adults in a double-blind randomized, placebo-controlled study. Geroscience. 2024;46(5):4671-4688.
Xue Y, Shamp T, Nagana Gowda GA, Crabtree M, Bagchi D, Raftery D. A Combination of Nicotinamide and D-Ribose (RiaGev) Is Safe and Effective to Increase NAD+ Metabolome in Healthy Middle-Aged Adults: A Randomized, Triple-Blind, Placebo-Controlled, Cross-Over Pilot Clinical Trial. Nutrients. 2022;14(11):2219.
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https://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMoa1506197
Walzik D, Jonas W, Joisten N, et al. Tissue-specific effects of exercise as NAD+ -boosting strategy: Current knowledge and future perspectives. Acta Physiol (Oxf). 2023;237(3):e13921.
Walzik D, Joisten N, Schenk A, et al. Acute exercise boosts NAD+ metabolism of human peripheral blood mononuclear cells. Brain Behav Immun. 2025;123:1011-1023.
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